No son pocas las ocasiones en las que queremos mejorar algo en nuestra empresa, pero sólo con la motivación o la intención no son suficientes para lograrlo, e incluso llevando a cabo ciertas actividades no lo conseguimos. ¿Te preguntarás cuál es el problema? Por si no te diste cuenta, el principal problema es la falta de planificación.
Ya seas el dueño de una empresa de más de 100 personas, un jefe de departamento, un autónomo que acaba de empezar, o un trabajador que simplemente desea mejorar, conocer este método puede marcar la diferencia entre lograr o no el éxito que andas buscando. Por ello, a continuación te enseñamos esta herramienta que te ayudará sin duda a mejorar en tu negocio, los SMART Goals, o Metas Inteligentes.
SMART es un acrónimo en inglés que significa:
S | Specific (Específico) |
M | Measurable (Medible) |
A | Attainable (Alcanzable) |
R | Realistic (Realista) |
T | Timely, Time Specific (Tiempo específico) |
ESPECÍFICO Una meta bien definida, concreta, con contenido sencillo y claro, apuntando lo que quieres que ocurra hará que lograr tu objetivo sea más fácil. Por ejemplo: ¿Qué vas a hacer? ¿Qué quieres lograr? ¿Cómo vas a hacerlo?
MEDIBLE Básicamente simplifica aquello de: “si no se puede medir, no se puede cuantificar”, y si no se puede cuantificar, ¿cómo sabremos si hemos alcanzado nuestro objetivo? Por ejemplo, si tienes una librería y quieres vender 30 libros al mes, este sería el objetivo a ser medido. Definiendo y estableciendo criterios concretos podrás rectificar y comprobar la evolución hacia este objetivo, de esta forma será más fácil alcanzar tu meta.
ALCANZABLE Si los objetivos establecidos no son alcanzables, lo más probable es que ni lo intentes. Aún con las mejores intenciones y motivado al máximo, si lo que te marcaste como objetivo sabes de antemano que es demasiado, tu subconsciente te jugará una mala pasada e incluso te impedirá que ofrezcas lo mejor de ti mismo. Cualquier meta debe requerir un esfuerzo, pero debe ser un esfuerzo adecuado, y sobre todo, gradual. Porque estableciéndose metas a diario es la forma más razonable de alcanzar lo que desde un principio pensamos era inalcanzable.
REALISTA No confundamos realista con algo sencillo o fácil de conseguir, pues de lo que estamos hablando son de cosas realizables, factibles, etc. Los objetivos no realistas y muy altos te aseguran el fracaso, y los demasiado fáciles no te ayudarán a desarrollar todas esas habilidades que están dormidas. Exígete, pero no demasiado, sólo lo suficiente para ir creciendo como empresa, empresario o trabajador, y día a día. Por ejemplo, y siguiendo el ejemplo de la librería, no puedo pretender vender SIEMPRE, y TODOS LOS DÍAS 20 libros, porque el sólo hecho de pensar en una cifra tan alta ya te desmotivará.
TIEMPO ESPECÍFICO Definir un punto en el tiempo, es concretar una fecha para conseguir esa meta, es decir, marcar en el calendario cuándo queremos conseguir lo que hemos establecido como objetivo, como meta. Porque no establecer un tiempo para hacer las cosas, conlleva a una falta de compromiso, y es que no determinar un límite en el tiempo alimenta a ese “dejar para mañana lo que puedes hacer hoy”. Por ejemplo, en tres meses quiero subir mis ventas un 10%.
Como centro de negocios que somos, y como última recomendación para todos aquellos empresarios, hombres y mujeres de negocios o seguidores de nuestros posts, desde Comfrot Business Barcelona os recordamos que en los negocios como en la vida misma: “una de las razones por las que nunca llegamos, ni somos capaces de conseguir nuestros objetivos y metas, es porque no tenemos eso mismo, ya que todas nuestras intenciones se quedan en propósitos, y un propósito no tiene nada que ver con una meta”.